En el Partido Socialista, hay principios que nos definen, que nos recuerdan que nuestra fuerza no se mide por jerarquías ni despachos, sino por las personas que forman parte de esta gran familia. Y entre esos principios hay uno que es nuestra esencia: 1 militante, 1 voto. No es solo una frase, es la regla de oro que garantiza que cada voz cuenta, que cada compañera y compañero, independientemente de su cargo o antigüedad, tiene el mismo valor en la decisión colectiva que forja el futuro de nuestro partido.
Cuando el pasado lunes registré mi precandidatura a la Secretaría General del PSRM-PSOE, lo hice con la convicción de que la militancia es el alma de nuestro proyecto político. Cada paso que estamos dando en esta campaña se construye sobre ese principio: escuchar, dialogar y sumar. Las agrupaciones locales son el latido del partido, y su voz, la fuerza que nos impulsa a mirar hacia el futuro con esperanza y determinación.
En estos primeros días de campaña, he tenido la suerte de visitar ya agrupaciones que son un ejemplo de compromiso y pasión por nuestras siglas. Totana, Fuente Álamo, Mazarrón, Lorca, Puerto Lumbreras, Molina de Segura y Alcantarilla han sido paradas imprescindibles en este camino. El calor y la acogida que he sentido en cada encuentro refuerzan mi convicción de que estamos en el buen camino.
En cada reunión, en cada café compartido, he encontrado el mismo deseo: revitalizar el PSRM, recuperar la ilusión y prepararnos para ser la alternativa que nuestra Región necesita. No hay discursos vacíos, sino conversaciones sinceras que giran en torno a los problemas reales de la ciudadanía y a la necesidad de que el partido vuelva a ser un referente de confianza, de justicia social y de progreso.
La fuerza de nuestras agrupaciones radica en su diversidad. He hablado con compañeras y compañeros que llevan décadas defendiendo el proyecto socialista y también con jóvenes militantes que ven en el partido una herramienta de transformación. Esa mezcla de experiencia y energía es el motor que necesitamos. Y, sobre todo, he comprobado que la militancia quiere participar, quiere decidir y ser protagonista de esta nueva etapa.
Por eso, reivindicar 1 militante, 1 voto no es un eslogan, es un recordatorio de que el futuro del PSRM está en manos de quienes, día a día, defienden nuestras ideas en sus municipios, en sus barrios y en sus lugares de trabajo. Es la garantía de que este proceso de primarias será un ejercicio de democracia interna ejemplar, donde todas y todos tengamos el mismo peso, sin importar el cargo orgánico o la posición institucional.
Durante las visitas, muchas y muchos me han preguntado por las claves de este proyecto que hemos bautizado como Volver a ganar. Les he respondido que se trata de mucho más que una estrategia electoral. Volver a ganar es recuperar la confianza, fortalecer el partido desde la base y construir equipos solventes que reflejen el pulso de la militancia. Porque no podemos aspirar a gobernar la Región si antes no gobernamos el corazón del partido con humildad, cercanía y escucha activa.
Esta campaña no es solo mía, es de todas y todos. Quiero que cada compañero sienta que su voto pesa, que su opinión cuenta. Quiero que nuestras agrupaciones sean espacios vivos donde la participación y el debate estén en el centro de nuestra acción política. Porque solo desde la unidad y la implicación activa seremos capaces de construir un PSRM fuerte, capaz de mirar a 2027 con la ambición de ser la alternativa real que la ciudadanía nos demanda.
Es cierto que no tenemos mucho tiempo hasta las primarias, pero os aseguro que haré todo lo posible para visitar cada agrupación, para escuchar vuestras inquietudes y compartir nuestra visión. Aunque tenga que ser a cualquier hora, estaré allí donde la militancia me necesite, porque estoy convencido de que este es el camino que nos llevará a recuperar la confianza y a volver a ganar.
A todas y todos los que ya estáis participando activamente, quiero agradeceros vuestro esfuerzo y vuestra confianza. Cada palabra, cada idea que aportáis enriquece este proyecto colectivo. Y a quienes aún no han decidido, os invito a ser parte de este camino. Juntas y juntos, podemos hacer grande al PSRM, devolverle la ilusión y situarlo donde merece estar: impulsando el cambio que nuestra Región necesita con determinación y unidad.
1 militante, 1 voto. Esa es la clave. Esa es nuestra fuerza.
Diego Conesa